miércoles, 14 de mayo de 2008

COMPAÑÍA LICARAYEN


¿Qué es la Compañía?

La Unidad Compañia es la rama femenina del Movimiento Scout a la que pertenecen las niñas de 11 a 15 años de edad. El Programa educativo y las etapas Guías, ayudan a acrecentar, reforzar y estimular sus conocimientos aumentando su autoconfianza. En la Unidad Guia la joven aprende a convivir y a trabajar en equipo, el sistema de patrullas, el respeto a la naturaleza y muchas otras cosas necesarias e interesantes en este período de edad. La Organización de la Unidad Compañia esta organizada en 4 cuatro patrullas, como máximo, que son equipos de 5 a 8 jóvenes. Cada patrulla tiene como símbolo y nombre un animal, del cual toman sus cualidades positivas y se identifican al máximo con el mismo. Todos sus miembros conocen sus características principales. Los principales hechos de la vida de la patrulla son registrados en el Tally de la patrulla y son identificados por medio del banderín, el cual representa el honor de la patrulla. Cada patrulla tiene una líder, llamada Guía, que es el responsable por la administración, disciplina, capacitación, actividades y buena presentación de su patrulla, es ayudada por una Sub-guía. Estas dos jóvenes, que también son integrantes de la patrulla, son escogidos por los mismos integrantes de la patrulla, sin la intervención de los adultos. Todos los Guías de las patrullas se reúnen, junto a sus dirigentes adultos en el Consejo de Unidad y tambien en la Corte de Honor.






El Trébol: Es el símbolo Mundial de las Guías. Las tres hojas representan los tres Principios del Movimiento, la relación con Dios, la relación con los demás y la relación con sigo mismo. La llama inferior representa a la llama del amor de la Humanidad. La vena que apunta hacia arriba representa la aguja de la brújula que señala el camino a seguir. Las dos estrellas representan la Ley y Promesa. El circulo exterior representa nuestra Asociación a nivel mundial y su inserción en la comunidad. El trébol en amarillo dorado sobre un fondo cyan representa el sol que brilla sobre todos los niños del mundo, sin distinción de raza o credo.


Etapas de Progresión


Las insignias de progresión son cuatro y corresponden a cada una de las etapas de progresión de la Rama Guia. Ellas son: Alba, Amanecer, Luz y Resplandor.






Modelo de Fé: Sta. Juana de Arco (1412-1431)

Patrona de Francia y Doncella de Orleáns "Guiada por Dios por medio de locuciones interiores, Santa Juana conduce al ejército francés a liberar el país. Finalmente, traicionada, muere en la hoguera. Ella se mantiene siempre fiel a Jesús y la Iglesia" La historia de Santa Juana de Arco es muy interesante y hermosa, está llena de aventura y plagada de intriga. Esta joven campesina, que llegó a ser la más importante líder militar de la Francia de su momento, merece que conozcamos su vida. Estamos ante una mujer verdaderamente extraordinaria. Dios la había elegido para que con su valentía de joven adolescente confundiese el arrojo de los hombres más maduros. "Llena de inmenso dolor, en la cárcel y cargada de cadenas, gritaba poco antes de morir abrasada en la hoguera a la que la iban a arrojar por hereje, y sin embargo, ella, en aquellos sublimes momentos que no se puede sino confesar la verdad, gritaba: "¡Ay!, ¡ay! ¡Qué horriblemente me tratan! Este cuerpo que nunca fue corrompido va a ser reducido a cenizas. Apelo al tribunal de Dios, juez de vivos y muertos"... Volvió la calma a su espíritu. Pidió comulgar y a pesar de ser condenada a la hoguera por herética le permitieron hacerlo. Contradicciones de la vida. Después ella dirigiéndose a su confesor, que estaba a su lado para asistirla y fortalecerla le preguntó: -"¿Dónde estaré yo esta tarde?"- "¿No tienes esperanza?, le contestó el sacerdote". - "Sí, replicó ella, con la gracia de Dios, espero estar en el Paraíso". Se abrió la puerta. Aparecieron unos soldados ingleses, la cargaron sobre un carro y la llevaron a la plaza. Estaba abarrotada de gente. Todos lloraban. Hasta el mismo Chauchón - el responsable de aquella condena - lloraba también. La ataron al mástil, prendieron fuego a la leña que había a sus pies y en medio de un profundo silencio sólo se oyeron sus tres últimas palabras: "Jesús, Jesús, Jesús", y un grito desgarrador. Aquel martirio de una joven de diecinueve años dejó huellas imborrables en las páginas de la más cruel historia.